Cambiar por cambiar: el intendente Bastian impone un nuevo logo y borra el trabajo de los alumnos de la Escuela 10

El intendente de San José, Gustavo Bastián, ha decidido cambiar el logo de la Reserva Educativa “Los Teros” sin previo aviso, sin consultar a nadie y sin considerar a quienes hicieron posible ese diseño. Este acto duele, ya que detrás de ese logo había una historia rica en compromiso y amor por el lugar, creada por los alumnos de la Escuela Nº 10 del barrio El Colorado.

La historia de la Reserva Educativa “Los Teros” es especial. En 2017, un grupo de chicos, docentes y vecinos se unieron para transformar un terreno abandonado en el barrio El Colorado en un espacio verde, de aprendizaje y respeto por la naturaleza.

 

Con el apoyo del municipio de aquel entonces y gracias a la Ordenanza Municipal 29/2017, la reserva cobró vida. No solo limpiaron el lugar y plantaron árboles, sino que también diseñaron su identidad. A través de un concurso y una votación entre los alumnos, eligieron el primer logo de la reserva, que mostraba un tero con orgullo y el nombre del barrio bien visible.

 

Ese logo representaba mucho más que una simple imagen. Era un símbolo del esfuerzo colectivo y de la educación ambiental desde la base. Reflejaba el compromiso de los chicos que se dedicaron a cuidar su entorno.

 

Sin embargo, de manera sorpresiva, el intendente Bastián presentó un nuevo logo. Lo publicaron en las redes sociales como si nada, con un diseño más "moderno", pero carente de significado. Sin historia. Sin consultar a nadie. Como si todo lo anterior no hubiera existido.

 

Y esto no es un caso aislado. Recordemos que hace poco se intentó desafectar parte del terreno para entregárselo al Club San Martín, con la idea de construir canchas de fútbol y salones, justo en medio del humedal. Gracias a la resistencia de los vecinos y a un fallo judicial, esa propuesta se detuvo. Pero el mensaje sigue siendo claro: no hay respeto por la participación ni por la comunidad.

 

Los vecinos, docentes y exalumnos ya están manifestando su descontento. No se trata solo de un logo; es una cuestión de memoria, de identidad, de reconocer el valor de lo que se hace con amor y en comunidad.

 

Lo más alarmante es que no es la primera vez que el intendente Gustavo Bastián minimiza lo que la comunidad ha construido. Ya intentó ceder parte de la reserva al club local para construir canchas de fútbol en un área natural protegida, justificándolo con el argumento de “darle uso”. Y ahora, con un nuevo logo impuesto desde arriba, vuelve a mostrar que no le da la debida importancia al medio ambiente ni al trabajo conjunto que realizan nuestros jóvenes.

 

Parece no entender que los chicos no solo dibujaron un tero. Le dieron vida a un espacio que hoy representa un pulmón verde para todos. Un lugar que nació del esfuerzo genuino, no de una orden política ni de un capricho de diseño.

 

“¿Es tan difícil preguntar, involucrarse, tener un poco de sensibilidad? Ese logo lo hicieron nuestros alumnos. Es de ellos, no de un escritorio”, comentó una maestra del barrio.

 

Ojalá esta vez escuchen. Porque cuidar la reserva no es solo proteger el ambiente. También es cuidar a quienes creen que otro futuro, más justo, más verde y más participativo, todavía es posible.

LOGO ELEGIDO POR ALUMNOS DE LA ESCUELA 10
NUEVO LOGO EN LA CUENTA DE INSTAGRAM DE LA RESERVA

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